viernes, 24 de agosto de 2012

Dos Gotas

Me asusto y corro a pedir perdón. Me pone malo esta situación. ¿Por qué siempre al final algo falla? Nos vino a visitar la cruda realidad, entró sin llamar. Me conformo con bailar un rato con la felicidad. Cantarle un blues, meterle mano, que me de un toque. Y empezar a asimilar lo raro que es todo si no estás. Andar así no hay bicho humano que lo enfoque.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Se tienen muchos colegas a lo largo de la vida, pero amigos, ¿cuántos?. Cuando te haces mayor empiezas a encontrar en tus compañeros algo que tu familia no puede darte. Te entienden, te ayudan, comparten tus cambios y experiencias nuevas, parece incluso que son más importantes que las personas de tu propia sangre, que son como tu segunda familia. Poco a poco, cuando crecemos nos damos cuenta de que realmente esas amistades se acaban rompiendo, que no estarán ahí siempre, que te acaban decepcionando y dejan de existir esos vínculos tan fuertes que sentías con 14 años, que personas que considerabas tus hermanos acaban siendo personas a las que saludas por educación, con las que no compartes más que un "hola" y "adiós", como mucho una noche de fiesta, un café. Decepciones, desilusiones, personas que sólo te cuentan lo que quieres oír, no lo que realmente es bueno para ti. Las decepciones duelen más que cualquier otro sentimiento en el mundo. Son ellas las que nos demuestran que hemos sido tontos, que esperábamos más de alguien que dio por ti en un pasado, pero que ahora no está disponible. Te acabas sintiendo solo, y realmente te preguntas si puedes confiar en alguien, cuando en el pasado tuviste a tu lado a personas a las que confiarías tu vida, pero te decepcionaron. Se pierde la relación con aquellos que hace 5 años afirmabas con seguridad que estarían en tu vida siempre, pero realmente sólo estaban de paso. Yo ya no espero nada de nadie, así no me sorprenden las decepciones.

Deja a un lado el problema, y vendrá la solución

Hay veces que nuestros actos influyen en nuestras vidas, en otras ocasiones son actos ajenos los que influyen, hay veces incluso que es la propia naturaleza o hechos abstractos los que nos afectan. Cuando afectan negativamente te preguntas; "¿Y ahora qué?", ¿hay que aceptar las cosas como vienen? ¿Por qué yo? ¿No puedo detenerme en el tiempo? Los segundos se consumen, y pasan los días, y cada uno es igual que el anterior. "¿Y AHORA QUÉ?". Deja a un lado el problema, y vendrá la solución.

lunes, 20 de agosto de 2012

.

Voy a matar a alguien, me está superando esta puta mierda ya cojones hostia coño caracolesISWUHFIRUGIRWUHGIUSDHVGUEHRGEIRNOUHGEIOAUSDFHGENQOIAUSFHGEQOIGURH.

sábado, 4 de agosto de 2012

Los huesos de los besos

¿Para qué quererte tanto? Si después te vas.